Cachan a policías extorsionando con 'mordida' y ¡se comen billetes!

Foto: El Imparcial

En Colombia, específicamente en el municipio vecino de Bogotá, Soacha, ha ocurrido un caso bastante peculiar que ha causado conmoción en la comunidad tras la difusión de algunos videos.

Se trata del arresto de varios agentes de la Policía que aparentemente estaban involucrados en extorsionar a comerciantes, exigiéndoles una suma semanal de un millón de pesos colombianos, equivalente a unos 4 mil pesos mexicanos.

Además de este comportamiento reprochable, lo que ha generado indignación es que, al momento del arresto, los agentes se tragaron los billetes que habían recibido de sus víctimas.

En el video se puede observar claramente a uno de ellos mostrando dificultades para respirar. "Queremos dejar constancia de que está ingiriendo el dinero", comenta uno de los policías que llegó al lugar para realizar la detención.

"Abra la boca, porque esto solo empeorará", le advierte. Y, en efecto, así sucedió. La dificultad para tragar y digerir los billetes provocó complicaciones en uno de los agentes, quien tuvo que ser trasladado a un centro médico y se encuentra hospitalizado en la actualidad.

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Según explicó el director de la Fiscalía de Cundinamarca, Carlos Manuel Silva, en una entrevista con Blu Radio, uno de los policías se tragó un billete de 100 mil pesos colombianos, aproximadamente unos 400 pesos mexicanos, y ocho billetes de 50 mil pesos, equivalentes a unos 200 pesos mexicanos cada uno. En total, esto suma 500 mil pesos colombianos, alrededor de 2 mil pesos mexicanos.

Como resultado, los agentes ahora enfrentan cargos por secuestro extorsivo, ya que se ha determinado que llevaron ilegalmente a la víctima a la estación de policía y exigieron una alta suma de dinero como condición para su liberación. También se les imputa el delito de extorsión agravada por intentar destruir la evidencia. En caso de ser declarados culpables, podrían enfrentar una pena de más de 30 años de prisión.

Según la información disponible, se sabe que la persona retenida había sido previamente vinculada a una investigación por un delito sexual. "Querían reactivar ese proceso, o al menos esa fue la justificación para llevar a cabo la extorsión", concluyó Silva.

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