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Ana Rosa, una viuda y madre de cuatro hijos, engañó a su amiga para secuestrar a su hija. Esta es la historia de cómo una madre confiada fue traicionada y una niña inocente perdió la vida.
Ana Rosa invitó a la pequeña Camila, de 8 años, a jugar en una alberca con su hija de 10 años. Como eran vecinas, la madre de Camila confió en Ana Rosa y permitió que su hija fuera a jugar. Sin embargo, en menos de una hora, Camila habría sido asesinada en Taxco, Guerrero.
Los detalles del crimen han causado indignación en todo el país. Se supo que la causa de la muerte de Camila fue por estrangulamiento y que su asesinato ocurrió minutos después de su llegada. Videos de vecinos mostraron a Ana Rosa y a un hombre identificado como José "N" sacando del lugar una bolsa negra, que se cree contenía el cuerpo de Camila.
Antes de ser linchada por los vecinos, Ana Rosa se hacía llamar Ale Estrada, nombre de su esposo fallecido en 2019. Con él tuvo cuatro hijos, el mayor de los cuales se convirtió en padre recientemente, haciendo a Ana Rosa abuela. Su hija menor, de 10 años, habría sido usada como señuelo para atraer a Camila.
Después de la desaparición de Camila, su madre comenzó a recibir llamadas exigiendo un rescate de 250 mil pesos. Sin embargo, tuvo acceso a un video que demostraba que Camila sí había llegado a su destino, contradiciendo las afirmaciones de Ana Rosa. Otro video mostró a una mujer y a un hombre cargando una bolsa negra en un taxi, lo que llevó a la familia a creer que el cuerpo de Camila pudo haber sido trasladado en ese momento.
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La denuncia ante el Ministerio Público facilitó la detención del taxista, quien reveló la ubicación del cuerpo de la niña de ocho años. Tras estos eventos, Ana Rosa fue linchada y murió.
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