El G7 pone en marcha plan para una nueva plataforma de moneda digital

El G7 pone en marcha plan para una nueva plataforma de moneda digital

Reuters.– Cuarenta de los principales bancos comerciales del mundo se han unido a un plan piloto liderado por el Grupo de los Siete (G7), la Reserva Federal (Fed) de Nueva York y los principales bancos centrales de Europa, Corea y Japón para crear una nueva plataforma de moneda digital diseñada para acelerar y mejorar los pagos transfronterizos.

En el proyecto Ágora participan siete bancos centrales en total y su objetivo es comprobar si los llamados depósitos bancarios "tokenizados" pueden utilizarse en combinación con monedas digitales tokenizadas de bancos centrales (CBDC) en un sistema más rápido y avanzado.

La iniciativa se centrará en lo que se conoce como CBDC "al por mayor" –que se utilizan únicamente entre bancos y no por el público– y tratará de resolver los problemas que plantean las distintas zonas horarias, los requisitos legales y los sistemas normativos y técnicos.


La lista de bancos comerciales participantes incluye a muchos de los mayores prestamistas del mundo, como JPMorgan, HSBC, UBS y el MUFG japonés.

Ágora, un proyecto liderado por el G7, y otro denominado mBridge, lanzado en 2021 por los bancos centrales de China, Hong Kong, Tailandia y Emiratos Árabes Unidos, al que recientemente se ha sumado Arabia Saudí, constituyen una especie de división en el desarrollo de los CBDC.

En abril de 2023, las economías del G7, conformadas por Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido, Estados Unidos, dijeron que estudiarían la mejor manera de ayudar a los países en desarrollo a introducir monedas digitales de bancos centrales en consonancia con las normas internacionales pertinentes. 

Masato Kanda, principal diplomático japonés en materia de divisas, dijo en su momento que el G7 antes de aprobar los CBDC deberían de asegurarse de garantizar factores como una transparencia adecuada y una gobernanza sólida. 

El colapso de la bolsa de criptomonedas FTX en 2022 “fue una seria llamada de atención” para que los responsables de política monetaria crearan una regulación transfronteriza, afirmó.