Un grupo de investigadores de la Universidad de Nagoya (NU), liderado por el especialista en neurociencia y psicología Nobuyuki Kawai, ha descubierto que escribir pensamientos sobre una experiencia negativa en papel y luego desecharlo puede reducir significativamente la ira. La técnica demostró que, al triturar o tirar el escrito, los participantes lograron disminuir su enojo casi por completo.
Kawai y su equipo realizaron experimentos en los que los participantes recibían comentarios insultantes y luego escribían sus reacciones. Algunos tiraron o trituraron el papel, mientras que otros lo guardaron. Quienes desecharon su escrito recuperaron su estado emocional inicial, mientras que los que lo conservaron mostraron solo una ligera reducción de su enojo. Kawai ve esta práctica como una herramienta útil, incluso en el ámbito laboral, para gestionar emociones negativas en el momento.
La psicóloga clínica Pilar Guerra también comentó sobre la utilidad de estas técnicas para controlar la ira. Sostiene que la gestión de la irritabilidad y el perfeccionismo puede ayudar a evitar explosiones de ira, y sugiere que el control de las expectativas personales y la independencia emocional contribuyen a mantener el bienestar.
Además, Guerra destacó que la ruptura de objetos en rituales, como el festival japonés Hakidashisara, tiene un significado catártico y cultural. Este acto simbólico ayuda a liberar emociones reprimidas y ofrece a las personas una sensación de control sobre sus sentimientos y sus vidas, abriendo paso a nuevos comienzos y la ruptura de patrones negativos.