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| Especial |
La precandidata presidencial de Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez, rechazó las acusaciones del presidente de Morena, Mario Delgado, sobre un supuesto conflicto de interés en relación con el lugar donde realiza sus conferencias y afirmó que financió personalmente su gira por España.
Gálvez respondió a las declaraciones de Delgado, indicando que se basan en una identificación errónea de una persona en una reunión con empresarios españoles, a quien los miembros de Morena habían considerado dueño de la casa donde lleva a cabo sus conferencias y al que, según ellos, le habría financiado el viaje a España.
La aspirante presidencial aclaró que sufragó los gastos con recursos propios y solicitó al gobierno de la Ciudad de México que clausure el lugar si hay irregularidades en su uso.
“La gira la pagué de mi bolsa, y la persona que está conmigo se llama Javier Fernández, no tiene relación con el individuo que señalan en Morena”, afirmó.
Asimismo, negó la existencia de una inversión millonaria por parte de los partidos de oposición que la postulan para la presidencia con el fin de posicionar conversaciones en redes sociales en contra del presidente, refutando así el reportaje de ProPublica que vincula a López Obrador con financiamiento del crimen organizado en su campaña de 2006.
En relación con el colapso de la Línea 12 del Metro, compartió la opinión del empresario Carlos Slim sobre la posible falta de mantenimiento como factor contribuyente al siniestro. Aseguró que tuvo conocimiento de informes de la empresa DNV que indicaban que los operadores habían reportado vibraciones en el tramo colapsado.
Además, anticipó que formalizará su registro ante el Instituto Nacional Electoral (INE) el 20 de febrero y comenzará su campaña en León, Guanajuato, el 1 de marzo a las 5:00 p.m. Sin embargo, anticipó la celebración de otro evento previo que mantendrá en privado.
Gálvez inició su conferencia matutina abordando su reciente gira en España y el Vaticano, destacando su encuentro con el papa Francisco, que describió como un momento espiritual donde discutieron temas como la "economía del descarte", la prevención de la polarización política y la promoción de la cultura de la paz. Con lágrimas en los ojos, aseguró que su encuentro con el papa fue de naturaleza espiritual.
En un consejo al presidente López Obrador, le recomendó realizar una visita a la Santa Sede para "llenar su corazón de amor", especialmente en respuesta al menosprecio que, según ella, expresó el mandatario hacia la protesta organizada por transportistas contra la violencia en las carreteras del país.
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